MIRADA DE MUJER

Las películas de Doris Dörrie Y Agnès Varda

La Biblioteca Roffo y Dale Cine te invitan a su taller por Zoom dedicado a dos de las cineastas europeas más destacadas. Análisis de filmes en cuatro clases semanales por Zoom, los jueves de febrero de 20 a 22.

Inscripciones en [email protected]

Sobre Agnès Varda

Agnès Varda (Ixelles, Bélgica, 1929 – París, 2019)

«Mi lucha siempre ha sido la de acercarme a una forma distinta de hacer cine, no la de sobrevivir en un mundo de hombres. Mi objetivo ha sido hacer buen cine y, después, ser feminista y cuestionarme lo que ocurre en el mundo desde un punto de vista femenino. En los tiempos de la llamada ‘Nouvelle Vague’ había otras mujeres rodando. Si no duraron no fue porque fueran mujeres, sino porque no eran tan ambiciosas y obstinadas como lo fui yo a la hora de experimentar». Agnès Varda

https://www.france24.com/es/20190329-muere-agnes-varda-feminismo-cine

En 1955 la cineasta Agnès Varda debutaba con la película La Pointe-Courte,
Agnès Varda nació con el nombre de Arlette Varda en Bruselas, Bélgica. Su padre pertenecía a una familia de refugiados griegos de Asia Menor y su madre era francesa. Estudió Historia del Arte en la École du Louvre antes de conseguir un trabajo como fotógrafa oficial del Teatro Nacional Popular o Théâtre National Populaire (TNP) de París. Le gustaba la fotografía, pero estaba más interesada en el cine. Después de pasar unos días grabando la pequeña ciudad pesquera francesa de Sète, en el barrio «La Pointe Courte», para un amigo con una enfermedad terminal que no podría visitarla por sí solo, Varda decidió hacer una película. De este modo aparece en 1954 su primera película, La Pointe Courte, que narraba la historia de una triste pareja y su relación en la pequeña ciudad. La película fue la precursora estilística de la Nouvelle vague francesa. En 1962 se convertiría en una nueva voz del cine francés con Cleo de 5 a 7, le seguirían películas como La felicidad (1965), Las criaturas (1966), Una canta, otra no (1977), Las cien y una noches (1995), Los espigadores y la espigadora (2000) hasta llegar a Caras y lugares (2017).
Varda fue pionera en la apertura de la dirección cinematográfica a las mujeres.

Sobre Doris Dörrie

Doris Dörrie (Hannover, Alemania, 1955)

 ‘Me siguen interesando sobre todo las relaciones humanas y el hecho de que todos busquemos a alguien que nos reconozca, porque somos seres maravillosos y frágiles. A veces, precisamente porque nuestras expectativas son demasiado altas, nos sentimos defraudados’. Esa búsqueda del amor se ha hecho con el tiempo más perentoria. ‘La historia de la humanidad ha cambiado radicalmente en los últimos 50 años. Nosotras, mujeres, somos independientes económicamente de los hombres, y podemos decidir si queremos o no tener hijos, lo cual es una gran revolución. La consecuencia es que la única razón para estar juntos dos seres humanos es el amor. Y precisamente porque este amor emocional es tan frágil y no se le puede controlar se hace muy complicado mantenerlo’. Doris Dörrie

Doris Dörrie. Nacida en 1955, plena posguerra, sus películas (cinco estrenadas en Argentina sobre un total de veintiuna. Hombres, 1985. Nadie me quiere, 1995. ¿Soy linda?, 1998. Sabiduría garantizada, 2000. Las flores del cerezo, 2008) son comedias de apariencia ligera, que transcurren entre gente común, personajes flotantes en la tranquilidad del ahora tambaleante estado de bienestar de Europa occidental.

A Dörrie no le interesan los grandes retratos ni las dimensiones del tiempo; sus protagonistas parecen no tener un pasado ni enfrentar un porvenir; su cine es puro presente, cuentos sin locura ordinaria, apenas historias de amor y desamor, de personas desencontradas consigo mismas, de descubrimientos y separaciones. Casi nada. Los hombres y las mujeres de Dörrie se juntan, se separan o se mezclan

(…) Mirada femenina sin subrayado ni admoniciones; que también puede volverse, con igual espíritu, sobre otra mujer; como en Nadie me quiere, en donde Fanny se ve llegar a la treintena sola y sin perspectiva de dejar de estarlo. Frágil e inestable en un mundo en donde todos lo son pero lo disimulan, Fanny se inscribe en un curso para amigarse con la muerte, duerme en un ataúd y se hace íntima amiga de un estrafalario seudo hechicero africano, un gay que le predice inciertos futuros venturosos de amor. De cómo la magia fraudulenta puede convertirse en realidad y la amistad y el amor concretarse en dimensiones surrealistas, trata Nadie me quiere, cerrada con una secuencia de títulos a la vez simple, bella y optimista; mientras los títulos corren a la derecha, un pequeño recuadro muestra a todos los personajes agrupados como para una foto en el otro extremo, haciéndole coro a Edith Piaf en ‘Non, Je Ne Regrette Rien’. (Extraído de “Hacerse la Crítica, por Eduardo Rojas).

PROGRAMA

CLASE 1

CLEO DE 5 A 7 (Agnès Varda, 1961)

Cleo, una joven cantante, espera impaciente los resultados de un examen médico. Cuando una adivina que lee las cartas le revela que tiene cáncer y que puede morir, su inquietud aumenta. Tratando de ocupar su tiempo a la espera de los resultados, Cleo conoce a un joven soldado, a punto de partir para hacer el servicio militar en Argelia, al que confía su temor a la muerte.

SIN TECHO NI LEY (Agnès Varda, 1985)

Varda hace un lírico réquiem de Mona, una adolescente vagabunda que es encontrada muerta, mostrando en flashback sus últimos meses de vida, su desarraigo social y sus relaciones con la gente que conoció.

CLASE 2

LOS ESPIGADORES Y LA ESPIGADORA (Agnès Varda, 2000)

THE GLEANERS AND I, (aka LES GLANEURS ET LA GLANEUSE), director Agnes Varda, 2000. ©Zeitgeist Films

Recorriendo Francia, Agnès Varda se ha encontrado con espigadores, recolectores, gente que busca entre la basura. Por necesidad, o por puro azar, estas gentes recogen los objetos desechados por otros. Su mundo es sorprendente. Y la directora, a su manera, es también una especie de espigadora que selecciona y recoge imágenes aquí y allá. 

VISAGES, VILLAGES (Agnès Varda, 2017)

Colaboración entre la veterana directora Agnès Varda y el artista gráfico urbano y fotógrafo JR (Jean René), un joven francés conocido por sus impactantes obras visuales que consisten en enormes intervenciones gráficas en calles y tejados de diversas ciudades de todo el mundo

CLASE 3

“Nadie me quiere” (Keiner Liebt Mich, Doris Dörrie, 1994)

Fanny Fink (Maria Schrader) trabaja como agente de seguridad en el aeropuerto de Colonia y vive en un edificio de apartamentos donde la gente no se conoce. A ella le gustaría encontrar un hombre no fumador, que trabaje y que tenga departamento. Uno de sus vecinos es Orfeo (Pierre Sanoussi-Bliss), un africano gay, pintoresco y encantador, que no puede pagar el alquiler, y se refugia en casa de Fanny. Entre ambos comienza una relación de amistad que deparará a Fanny muchas sorpresas.

“Soy linda?” (Bin ich schön?, Doris Dörrie, 1998)

El eterno deseo de ser otra persona aparece en esta película alemana de la conocida directora Doris Dörrie. En ella, una mujer se embarca en un matrimonio equivocado para poner fin a su apasionado amor por otro hombre, quien a su vez encuentra en España a otra mujer, en una suerte de danza ritual en círculos.

Clase 4

“Sabiduría garantizada” (Erleuchtung garantiert, Doris Dörrie, 2000)

Dos hermanos están viviendo una etapa difícil en sus vidas: Gustav es un experto en feng shui e intenta buscar su paz interior y Uwe no encuentra sentido a su existencia desde que su mujer le abandonara. Juntos emprenden viaje a Japón para alejarse de su entorno cotidiano y encontrar la tranquilidad, pero los problemas les persiguen allá donde van: nada más pisar tierra pierden sus pasaportes, se quedan sin dinero y no saben volver al hotel en el que se hospedan.

“Cerezos en flor” (Kirschblüten – Hanami, Doris Dörrie, 2008)

Trudi es la única que sabe que su marido Rudi está gravemente enfermo de cáncer. Siguiendo el consejo de su médico, deciden hacer juntos un último viaje. Trudi convence a su marido y van a visitar a sus hijos y nietos en Berlín. Sin embargo, éstos están demasiados inmersos en sus propias vidas para ocuparse de ellos. Tras ir al teatro a ver un espectáculo de danza Butoh, Trudi y Rudi deciden marcharse y pasar unos días en un hotel en la costa del mar Báltico.