Desde el 3 de mayo a las 20, comenzaremos con nuestro taller de cine para espectadores por Zoom (link con programa y requisitos de inscripción en http://dalecine.com/te-invitamos-a-nuestro-taller-de-cine-para-espectadorxs/). En el módulo dedicado a las puesta en escena, hablaremos del uso de la luz en las películas.

La luz es un elemento imprescindible para el lenguaje cinematográfico. Sin luz no hay cine. La iluminación crea sombras, arrugas, rejuvenece o envejece, crea efectos psicológicos del personaje, en función de donde se coloque cambia la atmósfera de una película, Federico Fellini, uno de lxs grandes maestrxs, dijo el respcto:

FEDERICO FELLINI HABLA SOBRE LA IMPORTANCIA DE LA LUZ EN EL CINE

“La luz es la materia de la película y, por lo tanto, ya lo dije otras veces, en el cine la luz es ideología, sentimiento, color, tonalidad, profundidad, atmósfera, narración. La luz es aquello que aumenta, anula, reduce, exalta, enriquece, desvanece, subraya, insinúa; es aquello que torna creíble y aceptable lo fantástico, el sueño, o, a la inversa, torna fantástico lo real, da espejismo a la cotidianidad más apagada, agrega transparencias, sugiere tensiones, vibraciones. La luz descubre un rostro, o le da brillo, crea opacidad, crea expresión ahí donde no la hay, hace inteligible la opacidad, rodea de seducción a lo incipiente. La luz diseña la elegancia de una figura, glorifica un paisaje, lo inventa de la nada, rodea de magia la decoración. La luz es el primer efecto especial entendido como caracterización, como engaño, como sortilegio, laboratorio de alquimia, máquina de lo maravilloso. La luz es la sal más alucinante que al quemarse emana visiones. Y aquello que vive en la película vive por la luz. La escenografía más elemental y más torpemente realizada puede, gracias a la luz, revelar perspectivas inesperadas, insospechadas y sumir la narración en un clima de suspenso, inquietante o bien, con sólo alejar un proyector y encender otro haciendo contraluz, se disipa la sensación de angustia y todo se torna sereno, familiar tranquilizador. El filme se escribe con la luz, el estilo se expresa con la luz”. (Federico Fellini en “Conversaciones con Fellini”, de Editorial Gedisa)